2. Confianza
Desde que fui a casa de León, no he dejado de pensar en cómo voy a hacer que mi relación con Nita funcione, por que quiera o no, ya es parte del equipo y me tocará poner de mi parte para que ella me caiga bien.
Por qué Leon vino a mi casa a disculparse, comentando de paso que le caía bien a Nita y que viniera más seguido.
Ni de broma regreso. Pero Aggh debe de agrádeme si quiero ganar la competencia.
Lo peor es que hoy voy a su casa a entrenar.
Tocó la puerta, y para mi sorpresa abre Nita.
—¡Sandy!
—Holaa Nita. . .
Intento forzar una sonrisa, de mala gana. A comparación de su saludo energético.
—¡Leon esta en el patio!
—mmh vamos
Y si, Leon esta ahí, esquivando disparos de una torreta de Jessie.
Apaga la maquina y voltea a nosotros.
—¡Sandy, Nita, vengan! Tengo que enseñarles algo hoy, a esquivar las balas. Es por eso que le pedí a Jessie que plantara una torreta.
—¡Nita quiere intentarlo!
Son un par de hermanos muy energéticos.
—¡Debes pasar la torreta! ¡Pero no la destruyas!
Leon prende la torreta, y Nita comienza a moverse de un lugar para otro, unas balas si dan, pero la mayoría no, de la nada corre directamente hacia la torreta, sus ojos se achinan, sus pasos crean pequeñas gritas en el piso que cada ves se agrandan. Va a lanzar un básico.
Sin pensarlo me acerco y uso mi gadget. Tropieza en la máquina, y su básico sale de lado.
Se levanta totalmente enfadada
—¡¿Qué hace Sandy?!
Reclama Nita
—Sandy protege la torreta de Jessie.
Comento molesto por su actitud imitando su modo de hablar
—¡Nita que te dije!
Leon se dirige a nosotros.
—ush cálmense, esta completa la máquina, es tu turno Sandy.
Paso a mala gana, comienzo a "esquivar" las balas (solo he esquivado 2) hasta que leon lo apaga.
—Vamos Sandy, se que puedes hacerlo mejor
Suspiro y vuelvo a esquivar, ahora si, totalmente las balas, ninguna me roza, en cuento me acerco vuelvo a usar mi gadget. Veo de reojo la cara de Nita, sus ojos detonan admiración.
—Oh Sandy, Nita, la maquina le falta batería, tú tonto gadget.
—Pero mi gadget dura un segundo-
—¿Podrían ir los dos a por una caja de baterías?
—¡Okey!
Nita sale corriendo a la casa y yo voy detrás de ella.
Para cuando entre a la casa, Nita ya estaba en un revisando un cajón, moviendo bruscamente todo, escuchándose montones de tornillos chocar entre ellos.
—Nita no sabia que eras fuerte.
Habló de repente. Esta es mi oportunidad para caerle bien.
—No has visto nada. Tu también lo hacías bien.
—Si. . . Pero no como tu.
Agacha su cabeza en tristeza
Me acerco lentamente con pena, no pensé que se pondría triste, y toco su hombro —O-oye, por eso estamos aquí, para ser más fuertes.
Me voltea a ver, su boca entreabierta y su mente hace click.
—¡Si! ¡Vamos con Leon!
Sale disparada al patio, supongo que ¿nuestra relación mejoró?, pero ya no ha sido tan abrumadora conmigo, espero y Leon la haya regañado, ahora toca mantenerla así. No más. . . no menos.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top